El nuevo inquilino de la consejería de sanidad, asesorado por su mano derecha, el también recién llegado gerente del SESPA, continúa tejiendo la maraña de altos cargos y responsables varios, que con más o menos galones, conforman la estructura sanitaria asturiana.
Ayer sin ir más lejos, se nombraba a Manuel Alonso jefe del servicio de cirugía vascular, y a Germán Juan como responsable de oncología radioterapia, los cuales, sería deseable se hicieran cargo lo antes posible de sus respectivos servicios.
Puesto que en el segundo de los nombramientos, el de Germán Juan, hace falta una restructuración de forma inmediata del servicio de oncología radioterapia, ya que como vulgarmente se dice, esta todo mangas por hombro desde hace tiempo, con las desastrosas consecuencias que ello está ocasionando a los pacientes en primer lugar, pero también a los profesionales adscritos al servicio. Muchos de los cuales, aunque no demuestran públicamente su desencanto, hacen saber que el mal estar existe desde hace mucho tiempo, demasiado tiempo diría yo, es por ello, que quienes vivimos muy de cerca las consecuencias de tan nefasta gestión, continuamos alertando de esta situación.
Y hoy igual que ayer me permito insistir, que la aplicación de ciertos criterios por parte de la Dirección del HUCA, no guarda relación alguna con los principios que la ética médica exige a quienes en su día hicieron el Juramento Hipocrático, algunos de los cuales, y a la vista de lo acontecido, parecen haberlo olvidado en su anterior despacho del Cristo, seguramente que a la espera, de que termine reducido a escombros.
Los derechos de los pacientes son inalienables, nadie por capricho personal, o por una simple vendetta profesional hacia unos determinados profesionales, puede retirar dichos derechos. Cuando hablo de derechos de los pacientes, me estoy refiriendo entre otros, a la libre elección de médico, algo que en oncología radioterapia, se está vulnerando desde hace muchos meses. Pues cuando un paciente exige por escrito que lo atienda un determinado especialista de ese servicio, no se puede argumentar que en oncología radioterapia no tiene subespecialidades, por lo que cada especialista puede hacer de todo. Mas cuando hasta hace dos años no ocurría esto, claro que por entonces no existía el mamoneo que de un tiempo a esta parte se viene produciendo, con la bendición de las más altas instancias, dirección del HUCA incluida, pero con nefastos resultados, y lo que es mucho más grave, perjudicando a los de siempre, que son los pacientes.
Los problemas de organización y funcionamiento de un servicio, del tipo que sea dentro de la administración, son circunstancias que no pueden ni deben influir en los derechos de los ciudadanos, más si cabe, cuando es una cuestión de índole administrativa de rango menor e interna, siendo por tanto inaceptable, que los gestores se escuden en este tipo de argumentaciones, que a todas luces vulneran los derechos de los pacientes.
Pero o nada podemos esperar de nuestros gestores y su lavado de cara, cuando de nuevo las puestas giratorias de la administración entran en funcionamiento, para así poder aposentar en una nueva poltrona, a aquellos que hasta hace bien poco fueron los impulsores de la mala gestión dentro del SESPA.
Así que no debe de extrañar a nadie, que a partir de ahora salgan a la palestra nombres como Tácito Suarez y Miguel Angel Rodríguez, los cuales parecen estar llamados a ocupar nuevos cargos,…El hasta hace unos días gerente del SESPA, recibe el premio de consolación, y dirigirá según todo parece indicar, el Area Sanitaria del Nalón, mientras que para el Director del HUCA, le tienen reservado Gijón, y es que algunos son tan validos, que son incluso capaces de trabajar de socorristas, aunque no sepan nadar y le tengan miedo al gua.
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