Sería aconsejable al tiempo que deseable, que el gerente del Hospital San Agustin de Aviles Enrique Gonzalez Fernandez tomará buena nota de lo que a continuación se dice. Algunos ciudadanos, desgraciadamente por nuestra experiencia personal, conocemos un poco lo que se cuece en la Sanidad pública en los últimos años. La mayor de las aberraciones que se están cometiendo con los pacientes, vienen propiciadas por la elección partidista y política de los gestores. Es decir, se deja de lado con demasiada frecuencia los principios constitucionales que rigen la administración pública, aquellos que hablan de igualdad, capacidad y mérito, y se anteponen los intereses políticos y de partido, colocando al frente del "chiringuito" no al más capacitado, si no al más afín al partido, y las consecuencias son más que evidentes.
Sin ir más lejos, las descomunales listas de espera no son fruto de la casualidad, más bien son el resultado de la nefasta gestión de un consejero de sanidad de infausto recuerdo para todos, pacientes y trabajadores, un tal Faustino Blanco González. Sirva como ejemplo del funcionamiento de la administración socialista el fulgurante ascenso de este personaje, el cual, tras dejar tras de si el mayor destrozo sufrido por la sanidad asturiana, es elevado a Secretario General del Ministerio de Sanidad. Vivir para ver, pero como se dice en Asturias "ye lo que hay"
Insisto D, Enrique, sería deseable por su parte, que tomase las medidas que la situación requiere, y que a groso modo se relatan a continuación. Al tiempo que debería de advertir a quien corresponda, que los dolientes son algo más que un número en un historial médico, cosa que parecen haber olvidado. Estamos hablando de seres humanos, los cuales se merecen un respeto.
Dejen de llenarse la boca con palabras grandilocuentes, al decir que van a "humanizar" la sanidad y ¡¡DEMUESTRENLO!!.
ooOoo
Urgencias del San Agustín... deshumanización en algunos de sus profesionales ...
Doce de la mañana, llega a urgencias una señora de 80 años acompañada de su marido he hija... le hacen la exploración correspondiente, y pasadas un par de horas, les llaman para informarles de cómo va la paciente... información concisa a la hija, "su madre está muy mal y en cuestión de horas posiblemente fallezca". La hija le pide que repita lo que termina de escuchar pues no daba crédito lo que estaba pasando, lo repitió y añadió, "que mejor avisara a la familia porque en dos horas,..." tres días tendría el fatal desenlace. Quien esto anunciaba a la familia no supo explicar lo que realmente tenía la paciente, aún a fuerza de preguntarlo una y otra vez, no supo dar respuesta alguna, salvo que su corazón no estaba bien...
Quedó ingresada en planta, con el consiguiente asombro de la médico de guardia, la cual al escuchar a la hija la explicación que le habían dado en urgencias,... pues no se corresponde con lo que veía en la paciente.
Día 11 de Julio de 2019... a quienes este día atendieron las urgencias en la mañana, y sobre manera a la doctora que informó a los familiares de esta paciente, sería bueno se pusiera en su piel, y tengan un poco de empatía hacia ellos. Están saturados ( seguro ) pero no es disculpa.
Me gustaría leyera mi queja Doctora, y se diera cuenta de que cuando usted informa, quiénes les escuchan, esos, son los familiares del paciente. Los cuales sufren un dolor inmenso por lo que está pasando. Si usted no está preparada para ello quédese en su casa, pero sobre todo, piense como se quedaría usted si alguien le dice a bocajarro, que su madre le quedan horas de vida, cuando no es así de momento.
Afortunadamente y a pesar de estas cosas sigue habiendo extraordinarios profesionales .
Para finalizar, si tenemos en cuenta que esta misma paciente se le dio de alta una semana antes sin estar bien para salir del hospital (hay que cumplir con las estadísticas). Con el agravante de haber sido presionada la familia por parte de la médico de planta y la trabajadora social, acusandoles de "no poner interés en buscar un centro para llevarla". Dado que en su domicilio, y debido a su estado de salud, era imposible atenderla, teniendo que buscar una plaza en una residencia privada en el mínimo tiempo posible.
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