Luis Hevia Panizo en el País de las maravillas

 

"En cinco años, el HUCA ya está mucho más avanzado que otros hospitales con tradición organizativa"

"Ningún asturiano tiene que pensar adónde ir para resolver su problema de cáncer porque tenemos los mismos niveles que Estados Unidos"

Luis Hevia Panizo – Gerente del Hospital Universitario Central de Asturias  - HUCA

Cinco años cumple el Hospital Universitario Central de Asturias – HUCA en su actual emplazamiento. El 14 de junio de 2014, sábado, el gran hospital de Oviedo, el buque-insignia de la sanidad asturiana, abandonaba el laberinto de viejos edificios del barrio del Cristo y abría sus puertas en La Cadellada, en una flamante y espectacular sede construida en los terrenos que durante décadas había ocupado el Hospital Psiquiátrico Regional. En septiembre de 2016, el médico Luis Hevia Panizo asumió la gerencia del HUCA, lo que implicaba dirigir una plantilla de unos 6.500 trabajadores y un presupuesto anual superior a los 500 millones de euros. En esta entrevista, analiza este primer lustro de andadura del hospital y anticipa líneas de trabajo para los próximos años.

-          El HUCA cumple cinco años. ¿Ya es mayor de edad?

Los primero tiempos no estuvieron exentos de dificultadas, algo lógico en un traslado de esta magnitud. Los dos o tres últimos años han sido de consolidación del hospital. Entiendo que el HUCA ya alcanzó la mayoría de edad hace tiempo, a tenor de algunos indicadores asistenciales, cualitativos y de reconocimiento en el panorama en el panorama sanitario internacional.

-          Usted, como gerente de un hospital grande, ¿qué parámetros considera más indicativos para saber que en el HUCA funciona bien?

Cuando asumí el cago, se me dio un encargo principal: situar al HUCA en el lugar que le corresponde. Lo primero son los indicadores asistenciales y de seguimiento, que se cumplen con creces. La actividad ha experimentado un incremento en todas las facetas: cuantitativas y cualitativas. Se ha ampliado la cartera de servicios en varias especialidades. Somos referencia a nivel nacional para varias especialidades, y alguna más que estamos consolidando. En nuevas terapias no somos ajenos a los que sucede en nuestro país.

-          ¿Satisfecho, entonces?

No sólo no hemos perdido ningún tren, sino que estamos siendo referencia para muchos hospitales que viene a visitarnos para ver cómo se hacen aquí las cosas. Pese a su juventud, el HUCA está mucho más avanzado que otros hospitales con tradición organizativa, sobre todo en lo que tiene que ver con las nuevas tecnologías. Con ese conjunto de indicadores, podemos afirmar que el HUCA va en la buena dirección.

-          No han cogido el primer tren de las terapias avanzadas CAR-T para leucemias y linfomas….

Nos hemos inscrito, y hemos alcanzado prácticamente todos estándares de calidad que se precisan, excepto algunos que estamos tratando de resolver. Esperamos alcanzarlos en la próxima reevaluación, que será dentro de seis meses.

-          ¿Irán a formarse fuera de España médicos del HUCA para estas terapias?

Eso no lo determina el hospital, sino la comunidad autónoma. Puede haber profesionales ajenos a este hospital que estén capacitados y pueden venir a hacerlo.

-          La acreditación del servicio de Oncología Médica por la que la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO) es un éxito.

Total. Ahora mismo, ningún paciente asturiano tiene que pensar adónde ir para resolver su problema de cáncer porque en Asturias tiene los mismos niveles de calidad que los hospitales punteros de Estados Unidos.

-          Los primero meses de funcionamiento del nuevo HUCA estuvieron marcados por el malestar con el programa informático Millennium. ¿Fue un acierto incorporar esta plataforma?

Visto desde este momento, no sólo fue un acierto indudable, sino que el desarrollo que le hemos dado está siendo ejemplo para otras organizaciones sanitarias de todo el mundo. Otra cosa es la metodología de implantación y el nivel de desarrollo que tenía la aplicación cuando empezó a utilizarse en el hospital. Es cierto que generó malestar, pero la buena disposición del personal y el ver las ventajas que ofrecía permitió superarlo. Ahora va empezar a funcionar en el Hospital Monte Naranco, que a efectos funcionales es una extensión del HUCA. Será la primera experiencia en España del Millennium compartido entre dos hospitales.

“Después de una fase de crisis, entre la plantilla del HUCA ha mejorado mucho el sentido de pertenencia”

-          El HUCA es hospital de referencia para toda Asturias en muchos tratamientos, operaciones y pruebas.

Siempre tenemos ingresados, aproximadamente, entre un 17 y 20 por ciento de pacientes que no son del área sanitaria IV. Y en lo que es cirugía, lo mismo.

-          ¿Cifras más destacadas de actividad del HUCA?

El año pasado tuvimos, en números redondos, 11.000 ingresos programados, 23.000 ingresos urgentes, 20.000 intervenciones, casi 293.000 estancias… Hemos bajado de forma notable el número de estancias que se obtiene al sumar los días que pasan ingresados todos los pacientes.

-          En cuanto esta la estancia media por paciente, uno de los caballos de batalla del HUCA desde hace muchos años?

Cuando llegué a la gerencia era de 9,1 días, y ahora estamos en 8,4 días. Hemos bajado, pero aún tenemos que bajar más. Tenemos que trabajar más en algunos servicios, sobre todo estancias preoperatorias de traumatología: personas que llegan al hospital,  están ingresadas hasta que se las estabiliza y luego las operamos. Ahí tenemos un margen de mejora bastante amplio, a causa de nuestros protocolos; otros hospitales lo tienen protocolizado de otra manea.

-          ¿Se gastan muchas estancias inútiles esperando por pruebas diagnósticas: resonancia, escáner,…?

No necesariamente. Si podemos mejorar en el día de ingreso. Tenemos procesos que serían susceptibles de que el paciente ingresara en el mismo día de la operación.

-          ¿Cuál sería la estancia media ideal?

Nuestro objetivo es bajar de ocho días. Pero no se puede lograr de golpe. No obstante, entiendo que la tendencia es positiva. Bajar décimas es muy difícil.

-          En los primero tiempos del nuevo HUCA, el estado de ánimo entre la plantilla dejaba mucho que desear ¿Observa ahora más orgullo de pertenencia al hospital?

Totalmente. Creo que es uno de los rasgos que más caracteriza a este hospital ahora mismo. Se ha pasado una fase un poco de crisis, entre comillas, y ahora las personas que trabajan en el HUCA, con carácter general, han mejorado notablemente en los últimos tiempos su sentido de pertenencia.  También por que reciben inputs de las personas a las que atienden, a través del boca-oreja, de los medios de comunicación, de gente de otros hospitales que viene a ver cómo hacemos las cosas…  Todo eso afianza el sentido de identificación con el hospital. Ver que estamos siendo ejemplo para gente que se dedica a lo mismo que nosotros, es un incentivo muy potente. Estamos viéndolo también en los concursos de traslados en la elección de plazas MIR, en los procesos selectivos y en los concursos para jefes de servicio y de sección.

-          Bajo su mandato se han cubierto más de 30 jefaturas de servicio y de sección ¿Contento con el grado de implicación de los mandos intermedios?

El compromiso ha aumentado: lo vivo en el día a día. Todo esto lo hemos hecho para intensificar la gestión clínica, o sea, para implicar a los profesionales en la gestión de los recursos disponibles. Es un modelo en el que tenemos que seguir avanzando Dar más autonomía y responsabilidad a los profesionales sanitarios mejora los resultados, sin duda.

-          ¿Cómo va a compensar la pérdida de horas de trabajo por la resolución de la jornada laboral a 35 horas?

Con la programación que tenemos prevista para los próximos meses, creo que podemos cumplir los compromisos de espera.

-          ¿Sin más horas extras o más plantilla?

En algunas categorías, con turnos y noches, va ser imprescindible contratar. En otros casos habrá que adoptar medidas de carácter extraordinario.

-          ¿En qué especialidad le preocupan más las demoras?

En traumatología, oftalmología y cirugía general. Mueven un volumen de pacientes muy grande y con problemas inherentes a una población envejecida.

-          ¿Cuántos trabajadores del área sanitaria de Oviedo ganan más que usted?

Sinceramente, nunca le he mirado. Me considero  bien pagado.

-          Ha habido elecciones y va a haber cambio de consejero de Sanidad. ¿Teme que lo releven?

No lo temo. Es algo normal, y lo asumimos desde el  primer momento. Cada día procuro trabajar como si fuera el último.

-          ¿Le queda restos pendientes en este cargo?

Puedo decir que nuestro equipo directivo aún tiene cosas que aportar