miércoles, 24 de enero de 2018

El Sespa y las cuentas de la lechera



Sanidad cierra el año con 111.507 personas pendientes de una cirugía, una consulta, o una prueba de diagnostico
La lista de espera quirúrgica estructural se redujo en 2017 en 400 pacientes.
A 31 de diciembre de 2017, un total de 21.634 pacientes esperaban por una intervención quirúrgica. De ellos, 2.332 seguirán esperando, porque no están de acuerdo con la derivación que a otros hospitales les quiere imponer el Sespa, en la mayoría de los casos, fuera de su área sanitaria. Este grupo de pacientes representa el 13% de esta lista quirúrgica. Otros 1.416  pacientes no pueden entrar en quirófano por diferentes motivos de salud ajenos a la intervención prevista. Restan 17.886 pacientes que figuran en las listas llamadas estructurales, según aseguran fuentes del Sespa. Esto implica una bajada de 400 pacientes menos que hace un año.
Fuentes oficiales aseguran que la media de espera para pasar por quirófano es de 70 días, tres menos que en el año 2016. Las mismas fuentes advierten que 107 pacientes llevan más de seis meses esperando por una intervención quirúrgica en el HUCA, todos ellos estarían vinculados al servicio de Cirugía General.   
Los pacientes afectados por estas largas esperas, en principio no formarían parte de los servicios más colapsados del sistema público de salud, que a día de hoy continúan siendo Traumatología, Oftalmología y Urología. Si bien en el servicio de Oftalmología, tienen 17 pacientes están sufriendo largas esperas, que en algunos casos rondarían ya los seis meses. Por otra parte, las listas de espera en estos tres servicios, se vuelven a disparar, sin que nadie a día de hoy consiga ponerles freno.
El pasado año se redujeron sustancialmente las listas de espera que afectan a las pruebas de diagnóstico, tales como resonancias o colonoscopias. En contraposición se encuentran las listas de ecografías, tac y mamografías, las cuales siguen aumentando.
A groso modo, decir que el año 2018 da comienzo con 61.913 pacientes esperando por una consulta con el especialista, lo que implica que son 10.400 menos que en el año 2016, aunque la comparativa no sea real del todo, al haberse cambiado algunos de los parámetros existen entonces, que permitían llevar a cabo dichos recuentos. Esto último viene propiciado, tras las conclusiones a la que llego la comisión de investigación de listas de espera que se llevó a cabo en la Junta General, que exigió al Principado, una mayor transparencia en los datos que ofrecen los centros sanitarios.
La mayor espera la tiene el Hospital de Jove
Si bien las mayores esperas las suele acumular el Hospital Universitario Central de Asturias – HUCA, al ser el centro de referencia de la CCAA, donde por razones obvias de equipamientos y recursos humanos, se realizan todo tipo de pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas. A finales del presente año, era el Hospital de Jove el que mostraba mayores demoras a la hora de realizar una cirugía, siendo esta espera de 77 días. Los hospitales ovetenses HUCA  y Monte Naranco por su parte, mantiene esperas de 73 días, mientras que el Alvarez-Buylla suma un día más y se elevan a los 74 días. Los que menos días de espera tienen son el hospital de Arriondas con 71 días, Valle del Nalón 69,  Cabueñes 67, Cangas del Narcea 63, San Agustin de Avilés 58 y el Hospital de Jarrio mantiene las menores esperas de la región con 56 días.

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