A vueltas con la Comisión del Uso Racional del Medicamento - CURMP

A vueltas con las medias verdades, o la verdades a medias, eso según se mire, y todo depende de quien este en el uso de la palabra. Digo esto, porque nos vuelven a vender el buen trabajo que viene realizando la Comisión del Uso Racional del Medicamento, la cual al parecer autorizo 179 tratamientos de las 278 peticiones que recibió.

Creo recordar que dicha comisión fue constituida en septiembre del año  2013. Y vino impuesta por exigencias del guion, eso sí, guion que un ciudadano del occidente escribió al entonces consejero de sanidad, obligándolo a buscar una trinchera donde parapetarse, para intentar repelar con su silencio, las envestidas que de forma continuada le lanzaba, con argumentos a todas luces irrefutables, los cuales terminaron por dar sus frutos. Es más, incluso se vio en la obligación de constituir una segunda subcomisión, denominada por aquel entonces “ad hoc”. La cual no dejo de ser una pantomima más, por medio de la cual el consejero pretendía cubrir sus miserias, que ya por aquel entonces, estaban demasiado aireadas.

LA CURMP  fue constituida en el seno del Servicio de Salud (Sespa) con el fin de asegurar la calidad de la prestación farmacéutica y garantizar que todos los ciudadanos tengan igual acceso al medicamento que necesiten, cuando y donde lo necesiten, cosa que en la legislatura pasada no se cumplió.

Claro que en primer lugar lo que nos deberían de contarnos los gestores de la sanidad pública asturiana, es quienes forman parte de esa comisión, pero también, quien o quienes nombran a sus miembros y miembras.

Dicho esto, sería bueno saber de verdad el número de solicitudes que entran en el registro de dicha comisión, y cuantas otras solicitudes son "desviadas" de aquella manera por el camino. Pero sobre todo, los usuarios tenemos el derecho de conocer los verdaderos criterios que se utilizan para aprobar o denegar los tratamientos que se solicitan. Pues como es bien conocido, existe una vara de medir para unas situaciones, mientras que en otras, priman los criterios que de antemano marca la administración política regional.

Sería bueno recordar, que los tratamientos cuando se solicitan están avalados por una imperiosa necesidad de administrarlos. La cual llega de la mano los diferentes facultativos, los cuales a su vez, son respaldados por su Jefe de Servicio. Por tanto, esta necesidad no es algo que nazca por capricho de nadie, o que lo haga por generación espontánea, su demanda es creada por  la necesidad contrastada de los especialistas, en base a sus conocimientos y a su dilatada experiencia profesional.

Pero es que además los profesionales están obligados a poner a disposición de los pacientes, no solo su sapiencia, conocimientos y buen hacer. Es que además, deben de poner todos los recursos que la administración tiene a su alcance y ellos conocen. Y cuando esta no los pone, es su obligación exigirle que lo haga, o en su caso, denunciarlo ante las instituciones pertinentes.

Y es que la Comisión de Uso Racional de los Medicamentos, que se debería de encargar de impulsar medidas para una mejor utilización y prescripción de medicamentos y productos sanitarios, y que pretende promover una prestación farmacéutica con criterios de "eficacia, efectividad, seguridad y eficiencia", no siempre actúa con tal fin.

Pues mientras las bases por la cuales se deberá de regirse la CURMP son unas, los criterios contrapuestos que marca la administración socialista que preside Javier Fernández son bien distintos. Ya que sin el menor rubor, pero sobre todo, demostrando carecer de todo tipo de escrúpulos, aplica conceptos tales como “coste-eficiencia”, lo que obliga a que algunos fármacos nunca sean dispensados, muchas de cuyas denegaciones están vinculados al ámbito de la oncología, y todo esto debido al elevado coste de los mismos.

A modo de recordatorio para todos y cada uno de los miembros y miembras de la CURMP, que se reunieron durante aquel fatídico año 2013 para muchos pacientes, aquí les dejo el enlace de este último informe que llegó a mis manos. Estos son mis argumentos, ellos  dan y quitan razones. 

Nunca voy olvidar esta afirmación ”la Abiraterona, no es la panacea…” tampoco a quien pronuncio ante mi semejante infamia.

http://www.gacetamedica.com/noticias-medicina/2014-09-28/especializada/abiraterona-aumenta-3-anos-la-vida-de-pacientes-con-cprc/pagina.aspx?idart=863629