En los últimos cuatro años, el hospital vio reducida en un 19% su actividad quirúrgica. Es el centro con mayor ocupación en sus plantas de ingreso y con la presión de urgencias más elevada, mientras que las plantas de hospitalización permanecen saturadas. Tiene por el contrario la menor proporción de camas.
Cabueñes es un hospital que actualmente opera un 19% menos de pacientes y, pese a ello, muestra el mayor nivel de ocupación de toda la sanidad asturiana.
El hospital público gijonés mantiene ocupadas al año, y de media, el 90,6% de sus camas. Es un once por ciento más si se lo compara con el promedio del resto de hospitales del Servicio de Salud del Principado (SESPA), incluido Jove. En Asturias, la ocupación hospitalaria media anual fue en 2014 del 79,8%. A lo largo del año, Cabueñes utilizó sus plantas de ingreso más, incluso, que el HUCA.
En el Hospital Central, antes del traslado a La Cadellada, la ocupación rondaba el 81%. Cabueñes casi duplica el porcentaje que, por ejemplo, tiene Cangas del Narcea, donde la ocupación promedio es del 53%. Además, el nivel de uso de las plantas de hospitalización fue a más en Gijón en los últimos cuatro años al pasar del 86 al 90%.
Cabueñes tiene que recurrir con excesiva asiduidad a las habitaciones de tres camas para poder dar cabida a todos los pacientes. El hospital gijonés perdió camas a lo largo de estos años al pasar de 455 en 2011 a 436 en 2014. En 2011 había intervenido a 7.794 enfermos, en 2014 bajó a 6.563.
EL QUIZ DE LA CUESTION o the question of the quiz
Según recoge el plan funcional, en ese mismo periodo, el Hospital de Cruz Roja aumentó su actividad quirúrgica en un 16%. Pasó de hacer en 2011 un total de 5.892 operaciones a casi 7.000 tres años después. De hecho, Cruz Roja hizo en 2014 más operaciones que Cabueñes (sin contar las ambulatorias).
Tal parece a tenor de los datos asistenciales que las operaciones que hasta 2011 hizo Cabueñes a través de las llamadas 'peonadas' fueron absorbidas luego, mediante la fórmula de concierto, por Cruz Roja, centro al que se le aplicó, además, una bajada en sus tarifas de entre un 5 y un 10%, dependiendo del tipo de proceso clínico. La lista de espera en estos cuatro años se mantuvo estable, en torno a los 2.400 pacientes. Varió la demora media para operarse que creció de 64 a 76 días.
Como pueden ver, no encaja un solo dato de los publicados por el SESPA. Mientras que algunos están más interesados en mentir y a manipular esos datos, que en trabajar y organizar, con el fin de poner coto al caos que reina en la sanidad. Mientras tanto, los pacientes continúan denunciando.
EL COLAPSO EN LA SANIDAD PUBLICA
José Luis Álvarez Lauret (Gijón)
Quienes, para nuestra desgracia, nos vemos necesitados de acudir al Hospital de Cabueñes con más frecuencia de la deseada, vemos cómo la situación de masificación en todos los servicios y el aumento en las listas de espera, tanto para consultas externas como para hospitalización e intervenciones en general, según mi apreciación, va en aumento año a año. Supongo que en el resto de hospitales de nuestra comunidad pasará lo mismo.
LA NUEVA ESPAÑA del viernes 20 de noviembre publicaba en titulares lo siguiente: Cabueñes tiene un desfase de más de cinco mil ecografías pendientes de hacer. Al leer algo así, uno no puede sino quedarse estupefacto, ¿cómo se puede permitir por parte de los responsables políticos de nuestra sanidad llegar a semejante situación? Hacerse una ecografía no es un capricho del paciente, sino que es a petición del médico especialista, para poder valorar el alcance de la dolencia del paciente. Si un servicio tan elemental hoy en la medicina de diagnóstico está colapsado, es de suponer que a partir de ahí falle todo lo demás.
Cuando nuestros políticos se llenan la boca de palabrería vacía de contenido, y como hacen muchas veces, presumir de que tenemos la mejor sanidad del mundo, pienso que deberían pasar cualquier mañana de día laboral por la planta baja del Hospital de Cabueñes y, viendo lo que hay allí, preguntar a la gente para cuándo le han dado fecha para ser atendido en consultas externas o cualquiera de los múltiples servicios que el Hospital presta.
Estamos a las puertas de unas elecciones generales, y seguro que, como siempre, los políticos nos vendrán con su acostumbrada matraca de promesas para no cumplir, ofreciendo puentes allí donde no hay río, y jugando al ¡y tú más! Para que tras gastar el dinero de todos en campaña electoral, y un par de meses de tiempo perdido, al final todo siga no igual, sino peor. Nos fríen con impuestos, viejos y de nuevo cuño, nos imponen copagos, nos recortan en todo, pero, aun así, vemos que todo funciona cada vez peor y que al país nos lo están endeudando en cantidades innombrables. Da la impresión de que para lo único que hay dinero es para pagar a políticos y asesores nombrados por el dedo del mandamás de turno, así como para el sostenimiento de un sinfín de chiringuitos y canonjías sin más utilidad que la de mantener a pesebreros bien remunerados. Siento ser tan desagradable y pesimista, pero mi impresión es que así va todo, y así lo expongo.
No imagines la sitguacion del hospital de Cabueñes, siempre defendi el maravilloso tratamiento a los pacientes, pero exacgtamente hace una semana hoy es 22-12-19 y me comento un paciente ingresado en traumatologia, que es donde tengo el problema de mi esposa, que ha quedado hace 2 años mal operada de una protesis de rodilla. y estamos en espera que ya hace 1 mes y pico de haberse hecho los analisis para la segunda operacion de dicha rodilla. el asunto es que me cuenta que es increible en las condiciones que esta el hospital al menos la zona de traumatologia. me cuenta que los colchones estan todos rotos , sucios , al igual que las almohadas sucias. y que las habitaciones no las limpian correctamente o no se limpian algunos dias. y que el pidio el alta. el fue operado de la espalda. en fin estoy preocupado y siento tristeza de que un hospital que funciono siempre de maravilla llegue al estado en que se encuentra. pienso que se deben tomar medidas no puede ser eso que lleguemos a estar como en Cuba con los hospitales. y parar de cuajo esto. hacer lo que haya que hacer. gracias.
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