El Principado no la incluyó en el calendario vacunal porque dice que su eficacia «aún no está demostrada». En 2015 hubo siete casos, cuatro de ellos en niños
El Principado no la ha incluido en la calendario vacunal infantil, pero los pediatras insisten en recomendarla. Es la vacuna del meningococo B -'Bexsero' es su nombre comercial-, un fármaco de reciente autorización sobre la que médicos y administración no se ponen de acuerdo. La Consejería de Sanidad aseguró el pasado día 20 de diciembre, cuando anunció que sí financiará la vacuna de la varicela en lactantes (hasta ahora la aplicaba a los 10 años), que el fármaco contra el meningococo B carece de eficacia demostrada. Afirma el departamento que dirige Francisco del Busto que los estudios realizados hasta la fecha no son concluyentes en cuanto a los efectos a largo plazo de esta vacuna que sí suministra, por ejemplo, Inglaterra a todos los niños.
Sin embargo, los pediatras opinan diferente y al igual que ha ocurrido ya con otras muchas vacunas (pasó lo mismo hace dos décadas con la del meningococo C y, sin ir más lejos con la reciente de la varicela) apuestan por su uso, sobre todo entre niños pequeños, en los que la enfermedad cursa con mayor gravedad. «Es la única medida preventiva de la que disponemos contra la meningitis B y como médico la aconsejo», asegura el pediatra Francisco Álvarez, miembro del Consejo Asesor de Vacunas del Principado e integrante de la Asociación Española de Pediatría. Sobre las reticencias mostradas por la Consejería de Sanidad, Álvarez asegura que «es cierto que no existen estudios a largo plazo, pero siempre ocurre lo mismo con las nuevas vacunas» y recordó lo ocurrido en su día con la del meningoco C, cuyas pautas de inmunización «se fueron modificando con los años».
Hasta 2013, no se contaba con ninguna herramienta para combatir la bacteria que está detrás del meningoco B. La vacuna se autorizó mundialmente en enero de 2013. Inglaterra ha sido el primer país en incluirla de forma rutinaria en su calendario pediátrico, para niños incluso de menos de seis meses. También está autorizada en algunas regiones de Alemania, Italia y Canadá, además de Estados Unidos.
El fármaco está agotado y no se prevé que esté en las boticas hasta mediados de 2016
El meningococo, detalla este facultativo, es una bacteria causante de infecciones «poco frecuentes pero muy graves, como meningitis y sepsis (infección generalizada), que pueden dejar secuelas importantes e incluso conducir a la muerte en aproximadamente 1 de cada 10 casos». Aunque este germen puede infectar a personas de cualquier edad, los casos son más frecuentes en niños pequeños y adolescentes.
Asturias registró a lo largo de 2015 un total de siete casos, de los cuales cuatro afectaron a niños y el resto a adultos. La incidencia en España es de 0,77 casos por cada 100.000 personas y año. Según datos de la Asociación Española de Pediatría, las tasas más altas corresponden a los menores de 5 años (13 casos por 100.000 para los menores de un año y 4,3 casos por 100.000 en el grupo de 1 a 4 años).
España, en el quinto puesto
España presenta una incidencia algo superior a la media europea, y la sitúa en el quinto puesto, después de Irlanda, Reino Unido, Lituania y Bélgica en el marco de la Unión Europea (UE), y en el segundo dentro de los países de mayor población. La enfermedad suele aparecer de forma repentina tanto en niños como en adolescentes y adultos generalmente sanos. «Evoluciona en muy pocas horas, por lo que siempre decimos a los padres que estén atentos a tres cosas: la fiebre elevada, la rigidez en el cuello y la aparición de petequias, que son pequeñas manchas rojas que no desaparecen si se presiona la piel del pequeño», detalla Francisco Álvarez.
El Ministerio de Sanidad autorizó la venta en farmacias de esta vacuna a partir del 1 de octubre de 2015. Se agotó en poco tiempo. El fármaco no estará disponible en el mercado hasta mediados de 2016. Su producción, abunda Álvarez, demora entre diez y doce meses, de ahí que haya que esperar. Con todo, este médico pide a los padres que «estén tranquilos. Estuvimos muchísimos años sin esta vacuna y no ha pasado más. Es cierto que el fármaco es una herramienta buena de prevención, pero no hay que desesperarse». El precio de cada unidad es de 106 euros. En niños menores de seis meses se necesitan cuatro dosis.
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