Como una imagen vale más que mil palabras.

Hoy deseo refrescar la memoria al Consejero de Sanidad del Principado de Asturias, al tiempo que me permito recordarle, que como profesional que dicen que es de la medicina, debería de mantener en pie su "Juramento Hipocrático".

Díario La Nueva España

La Sanidad asturiana no sabe, no contesta, ¿tendrá algo que ocultar?

9 de Octubre del 2013 - Jesús Alonso Penelas (Vegadeo)

¿A qué estamos jugando? La vida de las personas no son cromos para cambiar en una mesa de negociación, donde veo que es más importante resolver el sueldo de sus señorías que intentar controlar el comportamiento de uno de sus compañeros, que además de ser diputado algunos de ustedes lo pusieron al frente de la Consejería de Sanidad, en la cual debería velar por la salud de sus administrados, digo debería, pues no lo está haciendo, incluso está denunciado públicamente hasta la saciedad, mientras tanto algunos de ustedes miran para otro lado, otros mantienen un silencio que los hace cómplices.

Me consta que sus señorías son conocedoras a estas alturas, de que este personaje está manejando dicha Consejería como si se tratase de un cortijo andaluz de su exclusiva propiedad, con una capataz, a modo de directora del SESPA a la que la responsabilidad y el cargo le quedan grandes, escudados en una comisión ad hoc, que si bien se reunió el pasado día 20 de septiembre, permanece muda, ¿para qué se reunió?, para tomar un café, hacer una fotografía y salir en los medios, pues no se sabe nada más, y eso que a mí personalmente alguien me dijo que muy pronto tendríamos noticias, ¿noticias de qué?, seguimos esperando.

¿Cuándo contestará el ínclito Faustino Blanco González, okupa de la Consejería de Salud del Principado de Asturias, a mi escrito denuncia con número de registro 19810 de 2 de julio de 2013 presentado en el HUCA?

Para que vean que los denunciantes de este atropello sanitario que va tiñendo de vergüenza, en caso que algunos la tengan, el Parlamento asturiano, con el silencio de algunos de ustedes y la complicidad de otros, y para que sean conscientes de que sabemos el terreno que pisamos, les adjunto el artículo de la ley que ampara mi denuncia por la falta de respuesta.

Aplícase a ley 30/1992 (del Estado), que dice lo siguiente (art. 42):

1. La Administración está obligada a dictar resolución expresa en todos los procedimientos y a notificarla cualquiera que sea su forma de iniciación...

2. El plazo máximo en el que debe notificarse la resolución expresa será el fijado por la norma reguladora del correspondiente procedimiento. Este plazo no podrá exceder de seis meses salvo que una norma con rango de ley establezca uno mayor o así venga previsto en la normativa comunitaria europea.

3. Cuando las normas reguladoras de los procedimientos no fijen el plazo máximo, éste será de tres meses. Este plazo y los previstos en el apartado anterior se contarán:

a) En los procedimientos iniciados de oficio, desde la fecha del acuerdo de iniciación.

b) En los iniciados a solicitud del interesado, desde la fecha en que la solicitud haya tenido entrada en el registro del órgano competente para su tramitación.

Si a un escrito firmado por mi padre y presentado en la fiscalía del Principado de Asturias según obra en mismo el día 4/9/2013, esta fiscalía da respuesta de haber cursado diligencias de investigación penal nº 237/13 con fecha 12/9/2013, seguimos sin entender cómo desde la Consejería de Sanidad del Principado de Asturias transcurridos 90 días no fueron capaces de gestionar una respuesta, ante la gravedad de los hechos denunciados, ante los que creemos no cabe ampararse en silencio administrativo alguno.

A riesgo de caerles pesado con mis exigencias, que no son otra cosa que mis derechos, aquellos que están recogidos en la Constitución española y que no voy a permitir sean pateados vilmente, pues no se los debo a ninguno de ustedes.

Tras haber tenido que solicitar amparo a la justicia, les aseguro que no me van a callar, el hecho de que en mi cartera sólo dispongo de un simple carné de identidad, me permite no tener que doblegarme ante ustedes y así poder exigir responsabilidades, llevan demasiado tiempo (18 meses) cometiendo un atropello en la persona de mi padre, que además me consta que no es un caso aislado como alguno/a quiso hacer ver en un principio, pues esta misma situación la están padeciendo más pacientes.